El Musk, también más conocido como Almizcle, es una de las notas más icónicas y apreciadas en la perfumería. Originalmente, el Musk se obtenía de una glándula del ciervo almizclero, pero en la actualidad se utiliza Musk sintético y versiones vegetales para recrear su aroma sin recurrir a ingredientes de origen animal.
El musk tiene un carácter cálido, envolvente y ligeramente sensual. Aporta suavidad y profundidad a los perfumes, creando un efecto aterciopelado y duradero.
Es uno de los ingredientes clave en perfumería porque mejora la duración y proyección de las fragancias, ayudando a que el perfume permanezca en la piel por más tiempo.
Se combina perfectamente con notas florales, amaderadas, especiadas o dulces, convirtiéndo en un elemento esencial en muchas composiciones olfativas, tanto masculinas como femeninas.
El musk es sinónimo de elegancia, sensualidad y profundidad, una nota imprescindible en el arte de la perfumería.